Colombia está enfrentando una de las crisis económicas más duras de su historia reciente. Muchos sectores productivos están con sus ingresos congelados. Planes de trabajo, contratos, emprendimientos y nuevos proyectos están estancados porque la pandemia del COVID-19 no ha sido controlada y el tránsito libre se ve todavía lejano. La industria musical, en gran parte sostenida por los eventos en vivo, se ha visto gravemente afectada y el 17 de mayo de 2020 el Ministerio de Cultura de Colombia emitió un comunicado en el que pide a las cadenas de radio ayudar a algunos de los más damnificados: los artistas locales .
El documento, firmado por la ministra Carmen Inés Vásques, hace un resumen por “la importancia de la música colombiana para el Gobierno” y resalta que para ellos la radio “sigue siendo el medio de comunicación más importante del país”, por lo que hace una invitación a las emisoras comunitarias, públicas o comerciales a programar en sus parrillas de contenido las canciones de artistas nacionales. Según cuentan, este llamado "puede aumentar las posibilidades de ingreso de autores, compositores, arreglistas, productores musicales e intérpretes" con el incremento de regalías generadas por la radiofusión de las obras.
Para Luisa Piñeros, programadora de Radio Nacional de Colombia , es una iniciativa valiosa porque “viene siendo un llamado y un jalón de orejas a las emisoras comerciales para que le presten interés al abanico de posibilidades musicales que hay diferentes al pop o el reggaetón”. Y recuerda que es necesario que los músicos del país se registren en Sayco (Sociedad de autores y compositores) y Acinpro (Asociación de Colombiana de Intérpretes y Productores) porque “si la música suena en radio y ellos no están registrados en las empresas recaudadoras no van a tener ningún sentido económico esas sonadas radiales porque no van a ser monetizadas”.
Según cuenta Piñeros, las reproducciones de una canción de un artista que se programa en la emisora para la que trabaja no llegan a ser millonarias, pero “así les lleguen mil pesos, son mil pesos que les corresponden enteramente a ellos”.
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Radio Nacional de Colombia es una de las emisoras que más apoya el talento independiente y alternativo de las zonas más remotas del país. Su señal llega incluso hasta lugares como Atrato o Leticia. Ese alcance, además, permite a los nuevos proyectos forjar público y llegarles a espectadores de todo el territorio nacional.
Álvaro ‘El Profe’ González, director de Radiónica , celebra que es oportuno el anuncio. Los músicos consolidados o nuevos no van a tener la posibilidad de tocar en un buen tiempo y “aunque suene extraño creo que en los medios comerciales sí existe una cuota grande de artistas colombianos en el género urbano, el vallenato y el tropical; diría que la sugerencia del Ministerio de Cultura es importante para las bandas emergentes, sea cual sea el género, porque podríamos estar ante la perdida de una generación de relevo que es fundamental para que la música colombiana siga siendo protagonista dentro y afuera”.
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‘El Profe’ cree que la cuota colombiana en la parrilla de programación de emisoras musicales debe darse de forma natural como resultado de la búsqueda de nuevos talentos, “el 60% de la música que suena en Radiónica es colombiana y no me parece que sea positivo que en algún momento exista una ley que fije una cuota obligatoria de participación de canciones nacionales en las emisoras (…) pienso que cada medio debería hacerlo de manera autónoma o tener un cazatalentos para garantizarle al país nuevas generaciones de artistas”.
Importante: Es necesario tener en cuenta que para que un artista reciba regalías por sonar en radio debe sí o sí estar inscrito en organizaciones recaudadoras como Sayco y Acinpro en Colombia.
Para el dúo independiente Caravanchela , que ha tenido varios de sus sencillos rotando en la programación de emisoras públicas y comerciales de Colombia, “la invitación de MinCultura es necesaria para fortalecer la industria y la cultura musical nacional. En estos tiempos es una buena forma de apalancamiento para que a los artistas les entre algún tipo de dinero”.
Silvia Palencia, la voz del dúo, resalta que en caso de que los programadores radiales atiendan la sugerencia, es necesario abrirles la puerta a artistas nuevos que en verdad necesiten esa difusión y no enfocarse en aquellos que tienen carreras consolidadas o que cuentan con el apoyo de grandes disqueras. “Los mismos de siempre ya tienen qué comer y pueden sobrevivir todo el año, pero hay otros menos reconocidos que no tienen ese nivel de ingresos”.
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Los creadores de canciones como Puedo Esperar o Funky Feeling revelan que una sola reproducción en radio genera un pago muy pequeño para el artista, pero si es una obra que suena en más emisoras y logran un mayor alcance se pueden obtener pagos más significativos. Guillermo Palencia, guitarrista de Caravanchela, invita a que los artistas conozcan cuáles son todas las posibilidades de recaudación de dinero por conceptos musicales, “hay como 18 tipo de regalías que se pueden generar cuando una canción es utilizada en diferentes medios, no solo en la radio”.
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Las instituciones FESCOL y Unión del Sector de Música de Colombia escribieron en 2017 un documento al que llamaron Ley de Música que se quiere llevar al Congreso de la República y con el que buscan formalizar las actividades laborales y artísticas en Colombia y, además, crear un fondo para el fomento de la música que permita financiar actividades de promoción, formación, investigación, producción artística y difusión, asimismo, pretende ponerle el ojo a prácticas ilegales como la llamada payola, que fomentan la competencia desleal y que muchas veces les quita el espacio a proyectos con un musculo financiero limitado. El llamado de Min Cultura sirve como una alerta para que, tanto programadores de radio como oyentes, se interesen más por consumir la música que se hace en Colombia. Es necesario recordar que la obra de un artista también puede ser apoyada en redes sociales o plataformas digitales porque les ayuda a generar ingresos y a consolidar un público que a corto, mediano o largo plazo puede pagar una boleta presencial o digital para ver al artista en vivo. Países como Argentina o Chile han emitido leyes que obligan a las emisoras a programar música local, pero que no ha gozado de gran aceptación al ser una actividad impuesta y que no necesariamente está beneficiando a los artistas alternativos o independientes. En Colombia se ha querido promover esta regla, pero podría ser mejor utilizar recursos económicos para crear campañas desde el Ministerio, las Alcaldías y la Presidencia que apoyen las músicas con raíces colombianas en espacios importantes para los artistas como la radio y a su vez ofrecer incentivos a los medios de comunicación que se esfuerzan por resaltar las obras nacionales. Valdría la pena analizar casos de éxito que han funcionado para promover el turismo dentro de Colombia y ver cómo se puede adaptar al universo musical local fomentando en el oyente el deseo de apoyar y respaldar a los artistas de su tierra. Si hay un buen momento para conocer nuevos sonidos, composiciones y músicos nacionales es este.
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