Luego de haber presentado Amor Amarillo en 1993 y Bocanada en 1999, en esta producción Cerati continuaba su aprecio, pero aún así mostraba la fuerza y la vitalidad de alguien que seguía siendo necesario para definir al rock del continente.
Por: José “Pepe” Plata // @owai
Cuando se mira a Argentina en el 2001, se encuentra un país que salió a deber. Los años de opulencia y entrega a la paridad del un peso - un dólar se vinieron al piso y el país entró en crisis. Una que fue tan dura como definitiva. Justo el 20 de diciembre de ese año, suceden protestas en Buenos Aires por la renuncia del entonces presidente Antonio de la Rúa. En tan solo diez días más, se tuvieron cinco presidentes y una incertidumbre en pleno verano.
Gustavo recuerda estar en su casa grabando piezas sonoras que iban a ser usadas como separadores en el canal ESPN, cuando escuchó la transmisión de las protestas en la calle. Los sonidos de la radio filtraron la grabación y comenzó la reflexión creativa que sucedería entre la crisis y la necesidad.
La incertidumbre trajo insatisfacción, saqueos, tristeza y una profunda reflexión sobre el futuro de la industria musical argentina. Las compañías no iban a arriesgarse a publicar algo y la gente tenía que decidir si comía o consumía entretenimiento. Por lo general se escogió la primera. Justo al ver que el peso argentino escaseaba, surgieron sistemas alternativos de pago como el patacón y el lecompte. Y también, aparecieron sistemas de trueque y canje que le dieron el toque local.
También varios artistas publicaron discos en CDR, porque los costos para hacerlo industrialmente no podían ser asumidos por los sellos.
Bajo este ánimo social, comienza a escribirse Siempre es hoy , el disco con el que Cerati le decía al mundo que tenía un arsenal sonoro para un tiempo complicado y que servía para darle una mirada certera. Y es además un disco que aparece en una etapa intermedia. En ese 2001 se habían presentado los Once episodios sinfónicos , disco en el cual se hacían versiones del repertorio de Soda y de su carrera solista acompañados por una orquesta sinfónica. Las presentaciones se hicieron en Argentina, Chile, México y Venezuela en el 2002 y si bien hicieron que se reencontrara con su público, la gran pregunta era: ¿A qué sonará lo nuevo de Cerati?
Publicidad
Y esa pregunta fue respondida el 27 de noviembre de 2002. Sony Music Argentina lanza Siempre es hoy . Un disco que fue producido por dos mexicanos: Sacha Truijeque y Toy Hernández. Adicionalmente era un disco en el que además de su banda establecida, hubo colaboraciones importantes como la del hopper chileno Camilo “Tea Time” Castaldi (de Los Tetas ) y el músico folclórico Domingo Cura.
Pero ante todo, hubo mucha electrónica. Y esto es porque justamente esta inquietud no se había apagado. Al contrario, estaba muy vivo y como prueba de ello, estuvo el lanzamiento del disco de mezclas de Siempre es hoy y sus reversiones en el 2003.
Publicidad
+ Bien.
Siempre es hoy
fue pensado como un disco doble; pero dadas las condiciones de la sociedad argentina, decidió hacerse como uno sencillo. Eso no impidió que fuera un éxito en ventas y la demostración de que había Cerati para rato. (O era lo que se creía).Hoy, a sus quince años, se siente fresco y refrescante, un disco que se hace viejo sintiéndose joven y que queda con un aire único que se refleja sonoramente así:
1. Cosas imposibles : Sencillo de lanzamiento en el que además una guitarra funky, hay una base de programación que fue desarrollada junto a Flavio Etcheto.
2. No te creo: ¿Es una base hip hop lenta? No es posible negarlo ni afirmarlo, pero el uso de scratches de fondo, da cuenta del interés y el giro sonoro de esta pieza.
3. Artefacto: Una canción que se convirtió en una habitual de su repertorio. Canción suprema con orquestación y coro en pleno.
4. Nací para esto: Un tema con un aire setentero. Rock espacial y de acceso fácil.
5. Amo dejarte así: Puede sentirse como algo envolvente e hipnótico, una canción transformada en mantra en la cual se hace referencia al amor y a la decepción.
6.Tu cicatriz en mi: Otra muestra de un funk lento con juegos sofisticados. Una ca canción tan íntima como real en la cual se habla de una relación entre dos que se nota en demasía.
7.Señales luminosas: Aquí tenemos una muestra de pop supremo, en el que nuevamente las palabras parecen ser susurradas y terminan siendo el reflejo del amor y la coquetería.
8.Karaoke : Segundo sencillo de promoción. Una canción de pop electrónico que además se daba a la tarea de representar la situación de la imitación.
9.Sulky: Un encuentro musical único, entre el folclorista Domingo Cura y Cerati. La modernidad y la tradición van de la mano entre la chacarera argentina y la electrónica.
10.Casa: Una recordada combinación lírica entre Cerati y Deborah de Corral en la cual se expresaban los deseos de un hombre. Pop matizado con emociones.
11.Camuflaje: Aquí hay un suave uso de la programación electrónica para justamente hacer una canción que confiesa ser la de un hombre enamorado lleno de clisés.
12.Altar: En esta aparece el hopper Tea Time en lo que se siente como un fluido suave y determinante sobre las relaciones humanas.
13.Torre de Marfil: La base electrónica está heredada de un tema llamado Ailee, el cual es la muestra de ese apasionamiento sonoro por la electrónica y de cómo era ella capaz de amoldarse a sus inquietudes creativas.
14.Fantasma: Aquí hay una canción lenta y además calmada. Una especie de canción sobre una angustia y una realidad entre el desvelo y la tensión.
15.Vivo: Una de las más bellas canciones y letras del disco. Con una frase contundente como lo es: “El fin de amar es sentirse vivo.”
16.Sudestada: Comienza como una balada para luego estallar como algo una canción que se refiere a las emociones que van del temor a la decepción.
17.Especie: Una pieza final que le da el cierre al disco. Justamente la necesidad de afirmar que en esta ocasión la banda de Cerati estaba hecha para dar cosas únicas. Un canción en la cual hay rock, matices de electrónica y dulce pop. Y una que deja su final ser una especie de obra ambient.
Si la música sonaba así y había tanto de dónde dar, aquí hubo un encuentro único. Durante su presencia promocional en Bogotá, Liliana Saumet (mucho antes de Bomba Estéreo) rondaba esta entrevista.
Publicidad
Publicidad