A pesar de salir a finales de noviembre, el álbum 30 de Adele se convirtió en el proyecto discográfico más exitoso de la industria musical en 2021: rompió records en streaming y también en ventas de CD y vinilos.
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El primer sencillo del álbum fue Easy On Me , un track que sirvió para darle apertura a la nueva era y que tuvo un desempeño comercial impresionante.
Aunque todo apuntaba que el segundo sencillo de la era 30 iba a ser I Drink Wine , tema que Adele interpretó en vivo en dos programas de televisión, se eligió a Oh My God como el nuevo corte promocional debido a la gran popularidad que obtuvo.
Cuando salió el álbum, Oh My God se convirtió en la segunda canción más escuchada del proyecto: debutó en el #5 del listado de canciones de Billboard y es el tema más popular del disco, solo superado por Easy On Me.
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La canción es producida y co-escrita por el estadounidense Greg Kurstin: es la más movida (o comercial) del álbum y de las pocas que tiene una duración aproximada de tres minutos. En ella hay elementos de R&B y sonoramente se aleja de la melancolía que tienen otros temas del disco.
La letra también es refrescante al hablar de lo divertido que es volver a coquetear después de una decepción amorosa y del fracaso de un matrimonio. La expresión Ay, Dios mío se usa en el marco de volver a sentir deseo y atracción por otra persona.
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En varias entrevistas Adele cuenta que la idea de hacer Oh My God surgió cuando empezó a salir luego de la depresión que le causó su separación. Justamente esos elementos pueden verse en el video oficial donde ella está rodeada de personas que se tocan, se besan, bailan y se divierten.
El clip que visualmente está hecho en una sola toma, pero que incorpora elementos de edición para mostrar a Adele en diferentes etapas, fue dirigido por Sam Brown quien había colaborado con la británica en Rolling in the deep.
¡La música nos une!