Cada año en Coachella, los asistentes se esfuerzan por tener pintas cada vez más arriesgadas y escandalosas . Sin embargo hay algunos elementos que se repiten con cierta frecuencia y ya se convirtieron en el uniforme del festival.
Coronas de flores:
Inspiración setentera (sombrero y mangas campana)
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Maquillaje con detalles étnnicos o tribales.
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Flecos
Nostalgia noventera
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¿Por qué la pinta 'boho-chic' se volvió el uniforme de Coachella? Primero hay que tener en cuenta que la moda ha pasado a ser un elemento cada vez más importante en los festivales de música. Existen varias razones para esto y una de ellas es la gran cantidad de oportunidades comerciales que ven las marcas de moda en los asistentes. Tienen a miles de personas en su público objetivo en un solo lugar, así que es natural que quieran aprovechar para hacer negocios alrededor del evento.
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Curiosamente, el estilo de Coachella guarda muchos elementos en común con Woodstock: flecos, prendas teñidas naturalmente, flores y estampados étnicos, por mencionar algunos ejemplos. Sin embargo, mientras en Woodstock esta combinación de prendas era una declaración contracultural, hoy es todo lo contrario: obedece a una tendencia establecida por las grandes marcas (Casas como Forever 21 y H&M tienen líneas específicas para el festival.).
Otra razón son las redes sociales. Eventos como festivales y conciertos se han convertido en parte de nuestra identidad digital: nos gusta ver quien está, y al mismo tiempo, que nos vean, así que por eso le metemos un poco más de esfuerzo a lo que nos vamos a poner. Hace unos años, nadie se preocupaba por eso. Hoy, elegir una pinta "instagrameable" es prioridad.
La homogenización del estilo en Coachella también tiene que ver con la presencia de celebridades en el festival. Según Emmanuelle Drix, historiadora de la moda, “nos estamos convirtiendo en una sociedad más visible, y Coachella es la versión moderna y famosa del calendario social de la época Eduardiana”, según declaró a CNN.
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Empezó con Kate Moss y Sienna Miller en Glastonbury. Y hoy tenemos más iconos e “it girls” para seguir en Instagram e inspirarnos con sus estilos. "La moda de los festivales ya no es moda". Eso concluyó Cara Kelly en el USA Today. “El declive es tan viejo como el Rock n roll: surge una idea innovadora, gana popularidad, gana la atención de las grandes marcas, se vuelve estrategia de mercadeo, se hace menos cool”. Incluso ahora existen disfraces de asistentes a Coachella .
La tendencia setentera se convirtió en el uniforme del festival. Soñamos con un Woodstock para ser libres de vestirnos como queramos y expresar la individualidad y terminamos con el estilo de Woodstock para mezclarnos y vernos igual.
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