Las claves del éxito de ‘La casa de papel’, según Alex Pina, su creador

Aunque en España empezó en 2017, aquí en Latinoamérica conocimos en 2018 La casa de papel , una de las series más exitosas de los últimos años. Ya se convirtió en la serie más vista de Netflix en un idioma diferente al inglés y es un verdadero fenómeno de cultura pop. En abril de 2018, varias bandas de ladrones con máscaras de Dalí fueron desmanteladas en Argentina y Chile.

Su creador es Alex Pina, quien también estuvo detrás de las exitosas Vis a Vis y El barco (también disponibles en Netflix).  Empezó como periodista en diarios y agencias de noticias y luego se inclinó por el guion para televisión. Los Serrano fue su primera serie, con mucho éxito de audiencia. Ya fundó Vancouver, su propia productora, y recientemente firmó contrato con Netflix para una serie propia, que según nos adelantó, será sobre un DJ que aparece muerto, y como La casa de papel, tendrá mucha adrenalina.

La novedad

"En cine habíamos visto casos de robos perfectos, pero no tanto en la televisión. Soy fanático de este tipo de películas y queríamos trasladar un género que se ha tratado en el cine a una ficción seriada. Estábamos acostumbrados a lo norteamericano, pero aquí quisimos hacer algo con personajes mucho más emocionales. En el cine de atraco no siempre tienes la posibilidad de explorar más en los personajes, así que nos concentramos en ellos para hacerlos más interesantes y atractivos para el espectador". 

El ritmo

"Uno de los mayores retos al crear La casa de papel era lograr una serie “adrenalínica”, adictiva y frenética. Esa división del tiempo interno era lo que más nos preocupaba, pues si lo piensas, dentro de la serie solo pasan unos pocos días. Para mantener al espectador en tensión, y para que la serie fuera adictiva necesitábamos bandazos, explosiones, golpes y grandes hitos. Sin embargo, se dio muy bien". 

Los personajes

"En cualquier serie, los personajes son clave: ellos te pintan la realidad, y el sentido del humor. Para esta serie nos tomamos mucho tiempo en el diseño de personajes: queríamos que tuvieran muchas capas.

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"Otro elemento que la audiencia ha apreciado es la presencia de personajes femeninos fuertes como Tokio, Nairobi o la inspectora. En algún momento pensamos que el narrador fuera el profesor, pero nos inclinamos por Tokio. Estaba esa deuda con las mujeres y teníamos una historia de hombres, con un soporte masculino, pero necesitábamos la mirada femenina". 

"Hoy, las series tienen éxito cuando sus personajes son complejos y es difusa esa línea que separa al bien del mal, pues no sabes quién es héroe y quién es villano. Son moralmente ambiguos, tienen identidades que enamoran, con las que podemos identificarnos, y por eso son mucho más estimulantes para el espectador. Los personajes son el motor de la historia y lo que la hace interesante".