House of the Dragon temporada 2 llega a su fin este domingo 4 de agosto. Desde el primer episodio, titulado Hijo por hijo, la serie nos ha regalado escenas memorables, como la emotiva aparición de nuevos personajes que rápidamente ganaron nuestro afecto, como el pequeño perrito que nunca abandonó a su dueño.
La segunda entrega nos dejó con una de las batallas más intensas hasta ahora: la lucha entre los gemelos Ser Arryk Cargyll y Ser Erryk Cargyll. Este enfrentamiento no solo destacó por su coreografía, sino también por ser un claro reflejo de la división creciente entre el Consejo Negro y el Consejo Verde, afectando profundamente no solo a la Casa Targaryen, sino a todo el reino.
El doloroso funeral del hijo de Aegon y Helaena nos mostró un lado más humano del Consejo Verde. Este momento de vulnerabilidad permitió que los habitantes de King's Landing se sintieran más cercanos a ellos.
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Uno de los momentos más esperados fue la intensa conversación entre Rhaenyra y Alicent en el tercer episodio (El molino ardiente). Esta escena estuvo cargada de tensión y emociones contenidas, mostrando la complejidad de su relación y el peso de sus decisiones.
La batalla de Rook's Rest en el cuarto episodio, titulado El dragón rojo y El dorado, fue un espectáculo visual y emocional. La valentía de Rhaenys y su dragón Meleys enfrentándose a Aegon y Sunfyre, junto con Aemond y Vhagar, fue impresionante. La trágica muerte de Rhaenys a manos de Aemond y Vhagar dejó una marca imborrable en los espectadores, despidiéndose de la "Reina que nunca fue" de manera impactante.
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El quinto episodio, El regente, nos sacudió desde el inicio con la perturbadora escena de la cabeza de Meleys siendo mostrada al pueblo como un trofeo, una imagen que subrayó la crueldad de la guerra y las consecuencias devastadoras para todas las partes involucradas.
En el sexto episodio, La plebe, vivimos un momento conmovedor cuando Seasmoke, tras rechazar a Ser Steffon Darklyn -quien muere trágicamente bajo el fuego del dragón-, eligió a Addam como su jinete. Este evento fue un recordatorio de la naturaleza impredecible y mágica de los dragones.
Finalmente, nos encontramos con el reclutamiento de las semillas de dragón y la oposición del consejo para permitir que estos puedan tener la oportunidad de ser jinetes de dragón. Otra de las escenas más impactantes de la temporada: Rhaenyra llevando a las semillas para que estas pudieran convertirse en jinetes de Silverwing y Vermithor.
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